Ya está redactado el decreto, que saldrá en los próximos días. La medida será similar a la aplicada para ventas agroindustriales. Subirían de 2 a 3 puntos la devolución de impuestos
Lo prometido es deuda. Y el ministro de Producción, Francisco Cabrera, lo anunció en la última conferencia de la UIA, en Parque Norte, en medio de fuertes reclamos por la pérdida de competitividad y la retracción de las ventas que atraviesa la actividad manufacturera. Se trata del incremento de los reintegros a la exportación, cuyo decreto circula por los pasillos oficiales. Así como días atrás el Gobierno oficializó el aumento de los reintegros para las ventas al exterior de productos agroindustriales, hará lo mismo con los sectores industriales, muchos de los cuales argumentan que, al exportar, el Estado no les devuelve la totalidad de los impuestos que deben pagar durante el proceso productivo.
Ante el aumento de la presión tributaria de la última década, el sistema de reintegros quedó completamente desactualizado. Es por ello que desde la cartera productiva se les pidió a los sectores que presenten una nota con lo que pretendían de reintegros en función de su estructura impositiva. Cada uno envió su estudio y el Gobierno finalmente decidió incrementarlos en dos o tres puntos porcentuales, según el caso. Fuentes oficiales aseguraron que implicará un costo fiscal adicional de $ 2000 millones, que se sumará a los $ 2600 millones que representarán los mayores reintegros a las ventas agroindustriales.
Los impuestos que se devuelven son los denominados distorsivos, como Ingresos Brutos, Débitos y Créditos bancarios y las tasas municipales, que se pagan durante el proceso productivo y que no tienen sistema de compensación como el IVA, que se les devuelve por otra vía a los exportadores.
Los sectores que tienen hoy mayores reintegros son el automotriz y autopartes (6%) y bienes de capital y manufacturas de hierro y acero (entre 5 y 6%). El sector de químicos tiene 2,5%; el de metales básicos, entre 2% y 5% y el rubro farmacéutico, 2,5%. La exportación de oro doré, otro 2%. Todos estos sectores representan, según un estudio de la consultora Abeceb, el 93% de las exportaciones industriales. El resto de los rubros son menores, entre los que se incluye, por ejemplo, el textil y de indumentaria, que representa el 0,9% de las ventas de Manufacturas de Origen Industrial (MOI).
En el caso del sector automotriz, la Asociación de Fabricantes de Autos (Adefa) pidió duplicar los reintegros (llevarlos a 12%), mientras que la Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes (AFAC) reclamó 10%. La expectativa es que suban de 6% a 8%. Para el sector, se quedarán cortos.
De todos modos, una mejora de dos o tres puntos de reintegros mejorará la competitividad de estos sectores, especialmente los que tienen su negocio concentrado en el volumen. No se espera, sin embargo, que este beneficio impulse demasiado las exportaciones, ya que Brasil sigue sin reaccionar y gran parte de las ventas argentinas van a ese destino. Sin embargo, en este contexto recesivo, las empresas podrán ofrecer mejores precios a sus compradores internacionales, coinciden los analistas consultados.
«Un 3% sobre la facturación ayuda. No va a mejorar la rentabilidad de los sectores industriales, sino que le va facilitar la venta», sostuvo el economista jefe del Ieral, Juan Manuel Garzón. El analista afirmó que es positivo aumentar los reintegros como estímulo a la exportación, pero también remarcó que la Nación debe trabajar con las provincias para bajar los impuestos, ya que, de lo contrario, las jurisdicciones no tienen aliciente a reducir estos tributos porque luego el gobierno nacional se los devuelve ?a los exportadores? con los reintegros. A su vez, el líder de proyecto de Abeceb, Gonzalo Dalmasso, sostuvo que en el cortísimo plazo, con un Brasil deprimido, si hay aumento de las exportaciones, será muy moderado. «Los mayores reintegros generarán alivio en la competitividad, sobre todo sabiendo que el tipo de cambio va a estar planchado durante todo este año», afirmó el economista.
Según un análisis realizado por el Ieral con el nivel de exportaciones de 2015, el sistema de reintegros a las exportaciones (industriales y agroindustriales) tenía un costo de entre u$s 800 y u$s 1000 millones. Con las nuevas alícuotas, se incrementaría en unos u$s 300 millones.